martes, 13 de octubre de 2009

Dulces sueños

Una sensación extraña sobrevolaba esta noche mi cama. Una sensación rara, nunca la había tenido y como todo lo extraño causa miedo. Una sensación de incertidumbre y desesperación que me provocaba ligeras taquicardías.

Seguía dándole vueltas al asunto, porque, porque no podía dormir. Miraba al techo desesperado, a las paredes, pero ellas no tienen la respuesta son meras observadoras con su gotele como maquillaje. En esos momentos incluso parecen que te miran fijamente y ríen.

No se porque, mi cabeza da vueltas y vueltas, piensa y piensa. Es imposible de parar. Quiero dormir pero ella va a su aire. Y sigue y sigue con lo mismo.

Puede ser que por la tarde me haya tomado digamos...."unos cubatas", pero no eso lo he hecho más veces. No se lo que será pero ahí estoy. Dando vueltas sobre mi mismo, cual peonza frustrada. Busco, miro, observo, escucho, huelo......Nada. No hay nadie.

Mi cabeza sigue a su "bola", pensando y pensando. Pero yo necesito dormir.


Me levanto mareado, son las 4 de la madrugada. Abro la gran caja de los sueños y me tomo un Orfidal. Lo que necesito es no pensar, y eso es lo que voy a hacer. Dulces sueños para ustedes también.

lunes, 5 de octubre de 2009

Díficil de explicar, fácil de entender

Algo difícil de explicar y fácil de entender me sucede desde hace algún tiempo.

Me he acostumbrado a ti. A estar siempre contigo, a pasar las 24 horas del día juntos. Y eso es algo que no quiero cambiar por nada del mundo. A tu lado soy el hombre más feliz del mundo. Te conozco más, y eso hace que las conversaciones, las risas, las bromas y el amor fluyan mejor.

Es cierto que los principios son preciosos, es cierto que desde el primer momento sabía que estabas hecha para mí. Pero ahora ,6 meses despues de ese maravilloso 4 de Abril, me doy cuenta, que no estaba equivocado. Que eres la mujer de mi vida. Y me doy cuenta de lo muchísimo que te necesito a mi lado, en todo momento.

Cambiaría todo lo que tengo por abrir los ojos cualquier mañana y que estés a mi lado. Esa sensación es indescriptible, y el que la pueda describir no la siente como yo lo hago. Estar a tu lado es la felicidad en su estado máximo, y tu, el ángel que la porta y me la entrega todos los días.

Estoy convencido, es lo que quiero. Sólo pretendo que el estar siempre juntos no se alargue demasiado porque es probable que las ganas de vivir a tu lado me hagan tirarme de los pelos. Y yo calvo pierdo mucho.

viernes, 2 de octubre de 2009

Diagnóstico: Depresión post-vacacional

Ha sido un sueño, o todo lo ocurrido durante el mes anterior ha pasado realmente.

Recuerdo el mes anterior vagamente, recuerdo que todo era perfecto, que tu estabas a mi lado constantemente. Que hemos recorrido mundo, me suena que hemos parado por Estambul. Si, estábamos en Estambul, tengo la foto grabada en mi cabeza del atardecer en el Bósforo. El cielo rojizo quedaba flanqueado por los impresionantes minaretes de las mezquitas. Desde donde se llama al rezo.

También recuerdo que a la vuelta nos volvimos a marchar. Esta vez un lugar de playa. Por el Sur de España. El descanso era nuestro objetivo y así fue. El sol nos acompaño al principio, después nuestra compañera habitual, la lluvia nos acompaño durante los últimos días.

Todo esto ha sido real. O simplemente un sueño. Ayer al despertarme no lo tenía muy claro. Ayer, volvía a trabajar. Desorientado y sin ganas me dirigía hasta la puerta del hospital. Y tras el breve lapsus de un cigarro apareció en mi boca un soplido de desesperación. "Ya estamos otra vez aquí".


Sabiendo perfectamente como es mi trabajo empecé con ganas, no sin antes ir saludando a todas mis compañeras y describir brevemente mis vacaciones. El ritmo del trabajo me llevo en volandas durante toda la tarde, sin tiempo para sentarme y pensar que hace unos días estaba tirado en una hamaca tomándome un Martini y tomando el sol.

Hoy vuelvo al trabajo, pero en fin. Son sólo 3 días malos. Después... la rutina se instala de nuevo.